El dolor lumbar ocurre en todo el mundo. ¡Entre 2004 y 2008, se estima que se produjeron 2,06 millones de EPISODIOS de DOLOR LUMBAR solo en los Estados Unidos (EE. UU.)! Cada año, el dolor lumbar representa el 3,15% de todas las visitas a emergencia y el 65% de las lesiones del dolor lumbar ocurrieron en el hogar. Según las estimaciones, dos tercios de todos los estadounidenses experimentarán al menos un episodio de dolor de espalda durante su vida. Curiosamente, según un estudio, el dolor lumbar alcanza su punto máximo dos veces durante la vida: Entre los 25 y 29 años de edad y entre los 95 y 99 años de edad, independientemente de la causa. En cuanto a las diferencias de género, cuando se analizaron por grupos de edad de cinco años, los hombres de 10 a 49 años y las mujeres de 65 a 94 tenían un mayor riesgo de dolor lumbar en comparación con el sexo opuesto. Aquellos con ascendencia europea o africana tuvieron tasas significativamente más altas de dolor lumbar en comparación con aquellos de ascendencia asiática. Además, los pacientes mayores tienen el mayor riesgo de ingreso hospitalario por dolor lumbar.
Con el fin estudiar la incidencia de dolor lumbar entre los miembros activos en el servicio militar de EE. UU. un estudio de 2012 investigó la Base de datos de epidemiología médica de la defensa de EE. UU. Y analizó 13.754.261 años-persona de data (100 personas de 25 años equivaldrían a 2500 años-persona, por ejemplo). Los autores del estudio informan que las mujeres tienen una tasa de incidencia un 45% más alta que los hombres, y el personal mayor de 40 años tiene 1,28 veces más probabilidades de experimentar dolor de espalda que aquellos que tienen entre 25 y 29 años. En cuanto a los miembros del servicio solteros frente a los casados, el personal casado tiene una tasa de incidencia más alta (1,21) que el personal no casado, aunque no hay consenso sobre por qué esto es así. En conclusión, el género femenino, de edad> 40 años y el personal casado, tienen mayor riesgo de dolor lumbar en el ejército.
Un estudio analizó el consumo de alcohol y la incidencia de dolor lumbar para ver si había una relación causal entre los dos. Después de buscar en la literatura, no se encontró un vínculo positivo entre el consumo de alcohol y el dolor lumbar. Por otro lado, fumar contribuye claramente a la incidencia de dolor lumbar (¡Otra razón más para dejar de fumar!). Un estudio analizó el consumo diario, el número de años fumando y el consumo total de cigarrillos durante los años fumando en relación con el dolor lumbar en 29,424 pares de gemelos monocigóticos (idénticos), en los que solo uno de los dos gemelos fumaba. Los investigadores determinaron cuántos días en el año anterior tuvieron dolor lumbar (1 a 7 días, 8 a 30 días y> 30 días) y la edad, el género y el tamaño/índice de masa corporal de cada participante. Los resultados revelaron una asociación positiva entre el tabaquismo y la duración del dolor lumbar de 1 a 7 días (razón de probabilidades de 1,4), 8 a 30 días (2,1) y> 30 días (3,0) durante el año anterior.
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